Temperatura corporal en ancianos: temperatura normal y alteraciones

Artículo realizado por el Equipo de TKE Home Solutions

Viernes, 03 de junio de 2022

La edad comporta cambios en aspectos en los que antes ni reparábamos. Uno de ellos es la temperatura que suele experimentar fuertes cambios llegados estos años de oro.

Lo cierto es que las personas en este rango de edad son más sensibles al frío y al calor dado que les cuesta un poco más adaptarse a los cambios.

Al respecto, existe un problema de la termorregulación en ancianos que, según explican desde la Sociedad Española de Medicina Geriátrica (SEMEG), está más que documentado y al que debemos prestar una atención especial, sobre todo si esa persona no puede apenas valerse por sí misma.

Así, hay una merma en la capacidad de respuesta a los cambios de temperatura que ya no funciona tan bien como antaño, ya que se ha ralentizado y las personas ancianas precisan de un tiempo extra para normalizar la temperatura corporal, sobre todo cuando sobreviene un cambio de estación o se produce un cambio brusco en el ambiente.

Sin duda, la menor movilidad impide que mecanismos como la vasoconstricción como la pérdida de calor por la piel, o los escalofríos, no resulten tan eficaces como sí sucede en las personas más jóvenes.

¿Cuál es la temperatura normal en un anciano?

De esta manera, si en una persona relativamente joven nos encontramos con una temperatura que oscila entre los 36,5º C y los 37,2º C, cuando se alcanza la tercera edad esta desciende hasta situarse entre los 33,5º C y los 35,5º C.

Causas de los cambios en la temperatura corporal

La temperatura puede sufrir cambios que podría provocar tanto un caso de hipotermia como uno de hipertermia que en las personas de la tercera edad pueden ser situaciones particularmente peligrosas, sobre todo porque muchas veces ni ellas mismas se percatan del problema. Además, esto puede suceder sin una causa aparente.

¿Qué es la hipotermia?

De esta manera, cuando baja del umbral de los 35 º es factible desarrollar una dificultad de movimientos, una confusión mental e incluso el fallo de algunos órganos.

¿Qué es la hipertermia?

Por su parte, en la hipertermia sucede a la inversa, ya que el cuerpo alcanza una temperatura muy elevada que rebasa los 38 º. En estos casos se suele apreciar malhumor, confusión, piel reseca y las pulsaciones se aceleran o ralentizan.

A esto se suma que aquellas personas que presentan alguna cardiopatía o una demencia son más proclives a desarrollar estos trastornos. Por lo tanto, conviene permanecer ojo avizor y no bajar la guardia en momento alguno.

Consejos para mantener la temperatura corporal correcta en personas mayores

Solo hace falta ser consciente de esta realidad para, de esta manera, salir al paso de los posibles riesgos. En concreto, para evitar la hipotermia bastará con abrigarse correctamente, mantener en casa una temperatura agradable o realizar ejercicio como un paseo al sol que servirá para activarnos, además de convertirse en un estupenda manera de recoger nuestra dosis de vitamina D tan imprescindible para la salud.

Por su parte, para evitar la hipotermia, conviene resguardarse durante las horas de calor, vestir ropas apropiadas para la estación y beber agua en cantidades adecuadas para prevenir la deshidratación.

Preguntas frecuentes sobre la temperatura corporal de los ancianos

¿Cómo se puede bajar la fiebre en personas mayores?

En el caso de que estas precauciones hayan fallado, siempre podremos recurrir a una serie de medidas eficaces y rápidas para rebajar la fiebre. Así, al igual que ocurre con cualquier adulto o niño, tomar paracetamol o ibuprofeno cada 6 u 8 horas resulta de gran ayuda. También podemos optar por empapar un paño con agua un poco fría y aplicarlo en la frente y en las axilas. Si la fiebre persiste y no se aprecia una mejoría, el médico podría barajar ingresar al paciente en el centro hospitalario para someterlo a un tratamiento.

¿Qué causa una bajada de la temperatura corporal?

Permanecer mucho tiempo sin moverse o en una habitación de ambiente frío sin el debido abrigo también pueden afectar a la temperatura de una persona anciana y que esta descienda de manera peligrosa. Esta alteración corporal puede explicarse también por enfermedades como el hipotiroidismo o la ingesta de ciertos medicamentos. Siempre es conveniente llevar una buena ropa de abrigo y cubrir las partes del cuerpo más expuestas como la nariz, los pies, la nuca, la garganta o las orejas.